Las manos agrietadas son una preocupación común y, aunque generalmente no es grave, puede resultar irritante e incómodo. Si bien comparten similitudes con el resto del cuerpo en cuanto a su piel, las manos requieren una atención especial debido a su constante uso y exposición. A diferencia de los pies, que suelen estar protegidos y cubiertos, las manos siempre están expuestas al aire y otros factores externos. En este artículo te decimos cómo tratar y prevenir este problema.
¿Cómo prevenir la sequedad en las manos?
La prevención es fundamental para evitar las manos resecas. Siguiendo estos consejos, puedes mantener tus manos saludables:
- Hidratación regular: aplica crema hidratante en tus manos varias veces al día, especialmente después de lavarlas. Opta por productos que contengan ingredientes humectantes como la glicerina o el ácido hialurónico.
- Evita el agua caliente: el agua caliente puede secar la piel. Intenta lavarte las manos con agua tibia en lugar de agua caliente y limita el tiempo que las mantienes sumergidas.
- Usa jabones suaves: elige jabones suaves y sin fragancias agresivas. Recuerda que los jabones antibacterianos pueden ser más secantes, así que úsalos con moderación.
- Protección contra el frío: en invierno, protege tus manos usando guantes, especialmente al salir al exterior. El frío puede despojar a la piel de su humedad natural.
- No uses productos irritantes: si tienes piel sensible, evita el contacto con productos químicos agresivos como detergentes. Utiliza guantes para protegerte, en caso de manipular productos químicos.
¿Qué causa las manos secas y agrietadas?
Existen diferentes aspectos que desencadenan las manos secas y agrietadas, entre las causas más comunes están:
- El lavado frecuente de las manos, especialmente con agua caliente y jabones agresivos.
- El frío intenso, el viento y la baja humedad.
- El contacto frecuente con productos químicos agresivos, como detergentes o productos de limpieza. Debes proteger tus manos si vas a manipular estos productos.
- La exposición prolongada al sol, el aire acondicionado o la calefacción central.
- Algunas afecciones médicas, como la dermatitis atópica, la psoriasis o la eczema.
¿Cómo tratar las manos secas?
Si bien la prevención es clave, en casos más severos de sequedad y de manos agrietadas con heridas que requieren reparación, aquí te ofrecemos algunas sugerencias para tratarlas de manera efectiva:
Usa un jabón especial para manos
Lava tus manos con agua tibia y un jabón suave. Para esto, el Liquid Hand Soap será uno de tus mejores aliados. Contiene ingredientes naturales como la manzanilla, que ofrece beneficios reconfortantes y calmantes para la piel. En su fórmula también encontrarás vitamina E, la cual proporciona protección antioxidante y ayuda a neutralizar los radicales libres que pueden dañar la piel. Por último, este producto incluye aloe vera, reconocido por sus propiedades hidratantes y calmantes.
Dosifica una pequeña cantidadsobre las manos mojadas, frota para crear espuma y distribuye de manera uniforme. Luego, aclara con agua. Puedes utilizar este jabón tan a menudo como sea necesario.
Desinfecta
Si tienes manos agrietadas y sangrantes, utiliza un desinfectante suave, como el agua oxigenada diluida o una solución salina, para limpiarlas. Aplica con suavidad y evita frotar con fuerza.
Mantén la piel hidratada
Nuestra crema Ultimate Strength Hand Salve ha sido diseñada para cuidar las manos secas de manera efectiva. Esta fórmula, densa y humectante, proporciona un cuidado prolongado a las manos sensibles. ¡Manténlas protegidas a lo largo del día! Enriquecida con aceite de aguacate, aceite de eucalipto y aceite de semilla de sésamo, deja la piel suave y bien cuidada.
Para aplicarla, se recomienda usar una generosa cantidad sobre las manos limpias, especialmente en casos de sequedad severa. Para obtener mejores resultados, se puede reponer después de lavarse las manos. Este bálsamo es adecuado para su uso durante el día o la noche.
También puedes optar por nuestro Richly Hydrating Hand Cream, nuestra crema de alta hidratación con efecto inmediato, y protección incluso en casos extremos, que protege contra la sequedad más intensa y actúa frente a la pérdida de humedad. Con su uso, verás cómo tu piel adquiere una textura suave e hidratada, gracias a su textura rica y aterciopelada que se desliza suavemente sobre la piel.
Evita rascarte
Es fundamental resistir la tentación de rascarse, en caso de tener alguna herida, ya que esto puede retrasar la cicatrización y aumentar el riesgo de infección. Si sientes comezón, puedes aplicar suavemente una compresa fría sobre la zona afectada para aliviar la molestia.
Frío y manos secas: ¿Están relacionados?
¡Por supuesto! Durante los meses de invierno, la exposición al frío puede contribuir a la sequedad de la piel, incluyendo las manos. El aire frío tiene una menor humedad, lo que puede causar deshidratación de la dermis. Además, cuando las temperaturas son bajas, es común que las personas se laven las manos con agua caliente, lo que puede eliminar aún más los aceites naturales y contribuir a la sequedad.
Para evitar las manos agrietadas por el frío, es importante utilizar guantes al salir de casa, así como aplicar cremas hidratantes específicas para manos secas.
Unas manos bonitas y cuidadas suelen dar una buena primera impresión. Como parte de tu rutina de belleza, no olvides darle también protagonismo a tus manos. ¡Te lo agradecerán!