Destacar de las propiedades de la arcilla blanca de Amazonas sus componentes curativos, como su poder antibacteriano, cicatrizante, desintoxicante y regulador del PH.

Las propiedades de este ingrediente aportan beneficios a todos los tipos de pieles gracias a las propiedades que contienen.

Gracias a ser antibacteriano y regulador es ideal para las personas con pieles con tendencia acneica y grasas.

Su propiedad desintoxicante es perfecta para ayudar a las pieles secas, ya que aporta luminosidad y efecto suave.

La arcilla blanca es conocida por emplearse en formato mascarilla, por su gran beneficio de regular el sebo y eliminar las impurezas de la piel mediante la exfoliación. Pero no solo aporta el beneficio de limpiar y regular, sino que tiene la capacidad de calmar e hidratar la piel.

Por estos últimos dos beneficios - calmar e hidratar - es un ingrediente excelente para las pieles con problemas de dermatitis y psoriasis debido a que aporta alivio y elimina la descamación de la zona.

Como esta arcilla tiene propiedades astringentes es recomendable para las pieles con acné.

Las pieles secas y apagadas se benefician de la luminosidad que aporta la arcilla blanca, además, gracias a su alto nivel de minerales ayudar a hidratar, lo cual es un dos por uno en las pieles con tendencia a deshidratarse.

Durante siglos, los brasileños nativos han utilizado la arcilla blanca amazónica como terapia para aliviar el estrés y desintoxicar. Sus propiedades terapéuticas y limpiadoras la han convertido en un ingrediente muy querido para el cuidado de la piel. Dentro de las fórmulas para el cuidado de la piel, se sabe que la arcilla ayuda a mejorar visiblemente los poros mientras ayuda a purificar y matificar la piel.